Si todavía existe quienes piensan en el consumidor como un ente completamente pasivo frente al monstruo maligno de la publicidad, es hora de comenzar a analizar lo que se piensa. La teoría crítica de la escuela de Frankfurt tuvo cierto auge en las primeras décadas del siglo XX, pero a principios del XXI el consumidor de medios, mensajes y productos es completamente diferente.
El activismo de este consumidor es tal que es capaz de decirle a una marca con cuál agencia de publicidad trabajar y con cuál no. La compañía sueca, Volvo, está en pleno proceso de licitación para encontrar una nueva agencia global. Un grupo de consumidores activistas masculinos reclamaron a la compañía, a través de un blogger (Glenn Sacks) para que no eligiera a Arnold WorldWide de Boston como la agencia ganadora.
Este grupo no está de acuerdo con algunas campañas de la agencia por cómo ha sido tratada la figura masculina en el rol de padre. A pesar de que en otros trabajos la agencia ha generado esfuerzos comunicacionales que promocionan los valores familiares, el grupo de consumidores reclaman con empeño la posible contratación de Arnold por parte de la compañía automotriz.
No se trata sólo de que la marca descarte la agencia sino que, demás, este grupo le pide a Volvo que contrate a Euro RSCG. Estos pronunciamientos lograron que hasta el CEO de Arnold WorldWide, Fran Kelly, hiciera un pronunciamiento al respecto.
¿Indefensos frente a la publicidad y sus contenidos?
Diana Meinhardt
martes, marzo 06, 2007
Activísimos
Publicadas por Jhon a la/s 10:19 a. m.
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